Se encuentra dentro de la vega del arroyo que le da nombre, al norte de Quintanadueñas. Su principal exponente patrimonial es la Iglesia de San Cristóbal, que combina los estilos gótico y renacentista en su construcción. Data del siglo XIV, aunque fue objeto de profundas reformas en el XVIII. Presenta al exterior torre espadaña con dos filos de arco y contrafuertes en el testero, de los siglos XIV al XV. Bajo la portada barroca hay un arco en cuyo interior una hornacina alberga una escultura que representa a San Cristóbal. El templo es de una única nave con contrafuertes y crucero del siglo XVI, con cabecera plana.

Frente a la iglesia, destaca la presencia de una Casona de gran volumen, con tres alturas. En su parte superior luce un escudo y bajo la cornisa de piedra se abren pequeños huecos, que parecen sugerir un origen defensivo del edificio.

Es la localidad del municipio de Alfoz de Quintanadueñas ubicada más al norte. Se encuentra entre Arroyal y Mansilla de Burgos, a orillas del arroyo Carrramarmellar -afluente del Úrbel-.

El edificio más sobresaliente es su Iglesia de Santiago Apóstol, de estilo  renacentista. Tiene cabecera recta. El muro está recorrido por contrafuertes y en él se alternan vanos rectangulares con otros de medio punto. La torre, de base cuadrada, se levanta a los pies. Huecos con arcos de medio punto cobijan las campanas. Junto a la torre, en un lateral del templo, se dispone la portada.

Se encuentra ubicado al oeste de Quintanadueñas, en la ladera del valle del arroyo Pardillo. Su principal exponente artístico es la Iglesia de San Vicente, en la que se combinan los estilos románico y renacentista, junto con elementos posteriores. Su construcción actual data del siglo XVI, aunque fue objeto de reformas importantes en el XIX.

Edificada sobre una única nave, presenta capillas laterales y torre con arcos de medio punto en el campanario. Bajo la torre se abre la puerta de acceso, de 1765, formada por un arco de medio punto. A ella se accede por un porche soportado por columnas de piedra y con estructura de madera en el tejado. Todo el conjunto está delimitado por un atrio exterior con muro de piedra.

El municipio de Alfoz de Quintanadueñas se encuentra al noroeste de la capital de la provincia, entre Pedrosa de Río Úrbel y la Merindad de Río Ubierna. Agrupa las localidades de Arroyal, Marmellar de Arriba, Páramo del Arroyo y Villarmero, además del núcleo cabecero, Quintanadueñas.

La cabecera del municipio se sitúa en el curso bajo del río Ubierna, al norte de Burgos. En su entramado urbano destaca por su interés la Iglesia de San Martín Obispo, levantada entre finales del siglo XVI y principios del XVII sobre los restos de un templo románico anterior, del que procedería el impresionante altorrelieve con Pantocrátor y Tetramorfos que se encuentra en el interior de la iglesia.

Esta obra, fechada a finales del siglo XII, exhibe una gran calidad tanto en su ejecución como en su composición. Cristo en Majestad aparece sentado en un trono flanqueado por dos leones, en actitud de bendecir y con un libro en su mano izquierda. Alrededor, una original mandorla tetralobulada deja espacio a los cuatro evangelistas.

Otros vestigios de la primitiva iglesia de San Martín son las dos ménsulas que han sido reubicadas en el interior. Además,  destacan las tablas flamencas de la segunda mitad del siglo XV y los cuadros barrocos del burgalés José Moreno.

Al exterior, destaca la espadaña del siglo XVIII, además de los contrafuertes que recorren la nave y la portada del XVII con una talla de San Martín en el nicho y rematada por un frontón.

Además del templo parroquial, en Quintanadueñas hay varias Casonas, aunque su estado de conservación es desigual. Una de estas viviendas tiene un escudo en la fachada y otra, de carácter palaciego -del siglo XVII-, luce dos blasones a los lados de un balcón con herrajes protegido por un tejadillo.

Se halla ubicado en la parte más oriental del municipio, dentro de un suave llano junto al río Ubierna, entre las localidades de Sotragero y Quintanadueñas.

Son varios los elementos patrimoniales del pueblo, entre los que sobresale la Iglesia de San Martín (edificada entre los siglos XVI y XVIII). Su acceso, con arco de medio punto protegido por un tejadillo, tiene una portada de 1650.

Sobre ella, se alza la torre espadaña, con dos cuerpos de arcos en el campanario. En el muro, destaca la presencia de contrafuertes dobles en esquina. En cuanto al exterior, la única nave del templo está enfoscada y presenta capillas adosadas, al igual que la sacristía.

En la zona exterior del templo hay una Fuente de dos caños rematada por una bola en su parte superior.

Además, a la salida del pueblo se conserva un Crucero de piedra formado por una columna sobre tres escalones cilíndricos, todo ello presidido por una sencilla cruz.