Ya dentro del casco urbano se encuentra la Iglesia de San Román, construida entre los siglos XV y XVI, en la que se mezclan los estilos gótico y renacentista. Su portada interior corresponde al gótico flamígero. Cuenta con una nave central rectangular, dos capillas laterales y ábside recto, cubierto con bóvedas góticas de crucería sobre arcos ojivales. Su sencilla portada posee arcos y capiteles con motivos vegetales. La torre, de planta rectangular, cobija las campanas en dos troneras bajo arcos de medio punto. El conjunto está delimitado por un atrio perimetral de piedra.

Dentro del patrimonio etnográfico, destaca el Potro de herrar el ganado.

Se sitúa en una zona elevada por encima de La Bureba. En su término se localiza el Túmulo de La Brújula, un importante exponente del arte megalítico del Bronce Medio, datado en torno al año 1.500 a.C. Es el mayor monumento funerario de la provincia -con treinta metros de diámetro y casi dos de altura, y con una cista de piedra en el interior, en la que se hallaron restos de cerámica campaniforme-. A su vez, constituye uno de los escasos ejemplos de enterramiento colectivo.