Valle de Santibáñez
El municipio del Valle de Santibáñez se localiza entre Huérmeces, al norte, y Pedrosa de Río Úrbel y el Alfoz de Quintanadueñas, al sur, con la Merindad de Río Ubierna al este. Su población total son 488 habitantes y su extensión alcanza los 105 km2. Está formado por diez localidades, de las que Santibáñez-Zarzaguda es cabecera del municipio y abarca, con sus 183 habitantes, a la mayor parte de la población. El resto de entidades no presentan grandes diferencias desde un punto de vista demográfico: Avellanosa del Páramo (54 habitantes), La Nuez de Abajo (28), Las Celadas (26), Las Rebolledas (23), Los Tremellos (27), Mansilla de Burgos (46), Miñón de Santibáñez (13), Ros (41) y Zumel (47).
Avellanosa del Páramo
Panorámica de la localidad.
Esta localidad se encuentra ubicada en la parte más occidental del municipio de Valle de Santibáñez, a orillas del río Ruyales. El exponente patrimonial más destacable es la iglesia de la Asunción, en la que se mezcla el estilo románico y renacentista. La puerta con capiteles decorados con aves y adornos de fronda corresponde a la etapa constructiva más primitiva. El edificio es de planta rectangular y cabecera semicricular, con torreón cuadrado rematado por pináculos. Bajo este último se abre el acceso, adintelado.
A la entrada del templo puede contemplarse un sarcófago altomedieval, actualmente reutilizado con fines decorativos, que procede de la antigua ermita de Santa Eulalia, una de las que se levantaron en la localidad, junto con las de San Juan o San Roque, todas en un estado delicado de conservación. Más interesante es la ermita de la Sagrada Familia, un edificio urbano de planta rectangular y cabecera recta de mayor altura, con arcos carpaneles en el acceso y en la citada cabecera. El hastial presenta remate a piñón y luce una ventana con tres pequeños arcos de medio punto bajo otra de doble arco y un vano que cobija la campana.
En la zona limítrofe entre Avellanosa, Los Tremellos y Susinos del Páramo se encuentra el Menhir de la Buena Moza, que forma parte de la línea de monumentos prehistóricos que se extiende desde Cantabria hasta el norte de Burgos. Es una gran laja de piedra caliza de casi dos metros de altura, que presenta varias perforaciones como resultado de la erosión sufrida. En las proximidades de este menhir se han identificado varias agrupaciones tumulares, como las de Páramo Mayor y Vallejo de Ruyales.
Menhir de la Buena Moza.
La Nuez de Abajo
Aspecto del entramado urbano de La Nuez.
Se sitúa al sur de Miñón, junto al cauce del Úrbel. En su entramado urbano hay algunas casonas de los siglos XVI y XVII con escudos. Sin embargo, el elemento más relevante es la Iglesia de San Vicente, tardogótica -de principios del siglo XVI-. Tiene nave rectangular y ábside poligonal, muy elevados y reforzados por contrafuertes, con ventanas ojivales. La portada, adintelada y moldurada, se abre bajo una hornacina con la imagen del santo, protegida por un tejaroz con arco de medio punto sobre ménsulas.
Frente a una pequeña espadaña con campanil se alza el torreón cuadrangular, cuyo cuerpo inferior corresponde a una torre medieval con ventanas aspilleras. En el interior, destaca el bello retablo churrigueresco.
Iglesia tardogótica de San Vicente.
Ermita de Nuestra Señora de la Cuadra.
Entre Mansilla y La Nuez se halla la Ermita de Nuestra Señora de la Cuadra, de planta rectangular y cabecera recta, con contrafuertes y canecillos. Sobre el arco de medio punto de acceso hay una inscripción y un escudo de armas coronado. La espadaña tiene dos vanos cegados, campanil y remate a piñón.
Las Celadas
Iglesia de San Esteban Protomártir.
Se encuentra en la zona más occidental de Tierras del Cid, al oeste de Santibáñez-Zarzaguda. El elemento patrimonial más sobresaliente de la localidad es la Iglesia de San Esteban Protomártir. Edificada en una sola nave, presenta cabecera cuadrangular más ancha y elevada, con contrafuertes en las esquinas y vanos ojivales. Se accede al interior bajo el torreón, por una puerta adintelada y moldurada en la que una hornacina alberga la imagen del santo. Su retablo mayor es de estilo rococó, de 1776, y está sin policromar -excepto la imagen de San Esteban-. En las calles laterales, unos relieves del siglo XVI muestran escenas de la Pasión. Hay otros dos retablos, el del Rosario y San José (siglo XVII) y el del Santo Cristo, neoclásico, con un Calvario del siglo XVI.
La Ermita de Santa María, también llamada del Barrio o de San Roque y San Esteban, cuenta con una sola nave elevada sobre el presbiterio y el ábside, semicircular y con saetera central. En el hastial se abre el acceso adintelado, con una pequeña espadaña de un único vano. La entrada original, que luce un arco apuntado, está tapiada. La cornisa está recorrida por canes -unos lisos y otros geométricos o antropomorfos-.
Ermita de Santa María, con el ábside en primer término.
Las Rebolledas
Iglesia de San Juan Bautista.
Se sitúa en la carretera entre Mansilla y Quintanaortuño, en una zona llana entre altozanos. La localidad está bañada por el arroyo de Las Rebolledas, afluente del Úrbel. Su Iglesia de San Juan Bautista es el principal elemento arquitectónico. Es de estilo gótico, de una sola nave de planta rectangular y ábside poligonal, todo reforzado por contrafuertes y con canes lisos recorriendo la cornisa. Bajo el torreón se encuentra el pórtico, cerrado mediante un gran arco de medio punto que da paso a una puerta adintelada con cornisa moldurada.
A las afueras del pueblo hay una interesante Fuentede piedra con dos caños, rematada por un frontón, que forma parte de un conjunto de lavaderos y abrevaderos.
Fuente de piedra, lavaderos y abrevaderos.
Los Tremellos
Detalle del entramado urbano de Los Tremellos.
Es el núcleo más septentrional del municipio. Formado por dos pequeños barrios, está bañado por el río Ruyales, que nace en sus proximidades.
La Iglesia de la Natividad es el edificio más sobresaliente. Tiene cabecera recta, con dos capillas. Bajo el torreón, protegida por un pórtico, se sitúa la portada, con arco de medio punto. Está formada por cuatro arquivoltas, la exterior decorada con una guirnalda vegetal y el resto molduradas.
Los capiteles de las columnas también tienen decoración vegetal. El conjunto está delimitado por un atrio. En el interior destaca el retablo mayor, barroco de la primera mitad del siglo XVII -al igual que los altares gemelos de Nuestra Señora y de San José-.
Iglesia de la Natividad.
Mansilla de Burgos
Vista lateral de la iglesia de San Martín Obispo.
Es el núcleo más meridional del municipio. Se encuentra ubicado en un pequeño valle entre colinas. En su Iglesia de San Martín Obispo predominan los elemenmtos clasicistas, aunque se conserva de la primitiva iglesia el ábside románico, ya de transición al gótico, con arquerías externas ciegas, ligeramente apuntadas, un contrafuerte y una ventana con arco de medio punto, que se encuentra cegada.
El templo tiene una sola nave rectangular, muy elevada, dividida en tres tramos con contrafuertes. Tiene cabecera absidial y espadaña con remate a piñón a la que se adosa el campanario. Detrás de un pequeño pórtico cerrado se sitúa la puerta, adintelada y moldurada, sobre la que destaca un bajorrelieve de San Martín Obispo.
La carretera que cruza Mansilla divide el pueblo en dos barrios, más amplio el del lado sur. Para salvar el obstáculo que supone la travesía hay un paso inferior formado por un Arco de medio punto que forma parte de un muro de piedra que adapta su altura al desnivel del terreno.
Arco de medio punto bajo el muro que divide el pueblo en dos barrios.
Miñón de Santibáñez
Vista parcial de la travesía de Miñón de Santibáñez.
Se encuentra junto a la cabecera del municipio, muy próximo al cauce del Úrbel, con el caserío en la ladera. Su Iglesia de San Pedro Apóstol cuenta con la declaración de Bien de Interés Cultural. Fue construida a finales del siglo XII, sobre una sola nave está rematada por un ábside semicircular al este y torreón al oeste. Las bóvedas, además de otros elementos, datan del siglo XV.
En el exterior sobresale por su interés patrimonial la portada románica, una de las joyas arquitectónicas del Valle de Santibáñez. Sus arquivoltas apuntadas -protegidas por un tejaroz sustentado por seis canecillos- muestran un curioso catálogo iconográfico de temas profanos, de entre fines del siglo XII y comienzos del XIII.
Al margen de la decoración en zig-zag y picos resaltados de dos de las arquivoltas, del conjunto destacan los doce relieves circulares con los signos del Zodiaco que se sitúan en la última. En la tercera, dieciocho altorrelieves representan músicos, acróbatas y bailarinas. Hay tres figuras que parecen corresponderse con un rey, un monje y un anciano. Ya en el interior, merecen ser reseñados el retablo barroco y la imagen central renacentista del altar del Santo Cristo.
La iconografía de la portada incluye la representación de los signos del Zodiaco.
Ros
Imagen parcial de la iglesia de Ros, con la portada rematada por un frontón triangular.
Se encuentra muy próximo a la localidad cabecera del municipio, siguiendo la carretera que lleva hacia el norte hasta Los Tremellos. Su principal referente arquitectónico es la Iglesia de San Román, de estilo renacentista, que cuenta con una amplia nave. El ábside es poligonal, de dos cuerpos reforzados con contrafuertes y decorado por elegantes ventanales con arcos apuntados.
La portada tiene arco de medio punto decorado con casetones, enmarcado por pilastras molduradas y rematado por un frontón triangular en el que se encuentra un bajorrelieve con la imagen del santo titular de la parroquia. El torreón se dispone adosado a la cabecera, una ubicación muy poco habitual.
En el interior, destaca por su interés el retablo mayor, obra de Bartolomé de la Iglesia (de 1634), que cuenta con esculturas de la segunda mitad del siglo XVII. Además, hay otros cuatro retablos churriguerescos de la segunda mitad del XVIII.
Detalle de la plaza, con la fuente en primer término.
Santibáñez-Zarzaguda
El Valle del Úrbel, en las proximidades de Santibáñez-Zarzaguda.
Es la capital del municipio del Valle de Santibáñez, que se localiza entre entre Huérmeces, al norte, y Pedrosa de Río Úrbel y el Alfoz de Quintanadueñas, al sur, con la Merindad de Río Ubierna al este. Está formado por diez localidades: Avellanosa del Páramo, La Nuez de Abajo, Las Celadas, Las Rebolledas, Los Tremellos, Mansilla de Burgos, Miñón de Santibáñez, Ros, Santibáñez-Zarzaguda y Zumel.
La localidad cabecera del municipio se sitúa en un llano entre pequeñas elevaciones del terreno, en medio del valle del Úrbel, cuyo cauce discurre junto al pueblo. El elemento patrimonial más destacado es la Iglesia de San Nicolás de Bari, declarada Bien de Interés Cultural y Monumento Nacional. De estilo gótico, mantiene algunos detalles románicos, como los relieves encastrados sobre el reloj que se sitúan en la portada principal, y que proceden de otra iglesia. Constituyen una interesante obra escultórica formada por un Majestas Domini dentro de una mandorla rodeada por los cuatro evangelistas, con cuatro apóstoles a los lados. Otros relieves del muro del atrio y del interior de la iglesia podrían proceder del mismo templo que los anteriores. Entre ellos hay un San Miguel alanceando al dragón y un hombre cautivo, atado de pies y manos a un poste.
Iglesia de San Nicolás de Bari.
Detalle de la parte superior de la portada.
La planta de cruz latina que la iglesia tuvo originalmente se transforma con las dos naves adosadas. El conjunto se completa con el ábside poligonal, el torreón herreriano y la portada bajo el pórtico. En cuanto al interior, destaca el altar mayor, de estilo renacentista, unas interesantes tablas hispano-flamencas y un tríptico también flamenco.
La Ermita de la Virgen de las Eras es una construcción urbana rectangular con cabecera recta. La portada posee una sencilla puerta adintelada, sobre la que se sitúa una pequeña espadaña con hueco para el campanil, remate de frontón triangular y pináculos.
A las afueras de la localidad se levanta la Ermita del Humilladero, con cabecera recta y entrada adintelada con pilastras y friso moldurado. El perímetro luce un zócalo en relieve y cornisa con molduras.
Por lo demás, cabe citar dentro del patrimonio arqutectónico local algunas casas blasonadas, los molinos harineros de Somovilla y Villaniego y el inmueble que alberga la Casa Consistorial.
Zumel
Vista panorámica del pueblo, situado dentro del Valle del Úrbel.
Se encuentra muy próximo al cauce del río Úrbel. A las afueras de la localidad se levanta el Torreón, antigua construcción palaciega de mediados del siglo XV, de más de veinte metros de altura, formada por la torre del homenaje y el patio de armas que la rodea. Posee planta cuadrada y sus muros están rematados por ocho pares de canes en las esquinas y en el centro de cada uno de los cuatro paños. La entrada original tiene arco apuntado y está coronada por un escudo, mientras que la actual es adintelada. También en las esquinas del lienzo sur se conservan dos pequeños escudos.
La Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora es el otro elemento destacable. Es de estilo renacentista, con planta rectangular y cabecera poligonal, recrecida y reforzada con contrafuertes. El torreón presenta un doble arco de medio punto en cada cara, bajo el que se abre la portada, también de medio punto, con molduras que imitan arquivoltas. Hay otra puerta con arco de medio punto con chambrana, pero se encuentra cegada.
En el interior, destacan el retablo mayor barroco, de finales del siglo XVIII, y el del Santo Cristo, del mismo estilo, con una imagen del Crucificado del siglo XVI.
El Torreón es el elemento arquitectónico más significativo de Zumel.